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Mostrando las entradas de octubre, 2010

Una lista...

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Es la hora de la siesta y acá estoy otra vez. "Es la hora de la siesta" significa que mi día tiene un plan. Por lo general tengo un plan para el día, que voy a hacer, cocinar o no cocinar, si voy a ir de compras o si no, mi hora de tomar una ducha, el momento de secarme el pelo en el baño de arriba es el momento donde subo a Verena conmigo y ella juega en piso mientras me mira y ve que estoy cerquita, y demás. Después de tener a Matías mi memoria no era tan buena... entonces comencé a hacer una lista de las cosas para hacer el próximo día. Cada noche antes de dormir la escribía y la dejaba en mi mesita de luz para verla al levantarme. Aveces ser así es bueno otras veces e tenido que ser flexible. La flexivilidad la aprendí con el tiempo porque no me gustaba el sentimiento de frustración que venía cuando algo no salía a lo planeado... Pero aveces las cosas pasan sin ser planeadas... Hoy estaba en facebook viendo los comentarios de mi estado y fui a la página principal donde

David, Ruth, Andrés, Eli, Darío

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Hoy me desperté entre sueños, eran las 5 y me di cuenta que estaba en casa con la luz del valador prendida como casi todas las mañanas hago para no estar tan dormida en la primer comida de Verena. Tuve un sueño hermoso! estábamos todos en casa de mamá, todos mis hermanos, sobrinos, Ben, aún la mamá de mi cuñado y por supuesto todos incluye a papá. Me acuerdo que más de una vez mi papá me dijo, "voy a estar tranquilo el día en que todos ustedes estén ya casados en el templo." Hoy se casó por civil el último de nosotros, mi hermano o hermanito Darío y éste fin de semana se sellará en el templo... No lo puedo creer, me acuerdo bien cuando él era chiquito, cuando mamá lo vestía y él tenía piernas muy gordas! era pelado y de nariz chiquita. Dormía en una cuna blanca abajo de una ventana en un costado de la pieza de mamá y papá. De esa ventana siempre entraba sol, había una cortina gruesa rayada y en invierno mamá dejaba que el sol entrara. Me encantaba acostarme en la cama de mam

Matías y las monedas

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Cuando era chica solía antojarme con juguetes o golosinas, recuerdo muy bien que mamá me decía "No seas caprichosa!". También recuerdo las veces que empecé a darme cuenta lo bueno y gratificante que era trabajar por lo que uno quiere. Mi abuela Julia siempre fue muy buena abuela. La clase de abuela que te enseña. "No mires tele, leé un libro", "agarrá el tenedor más arriba", "cuando leas y no sepas una palabra buscála en el diccionario", etc. La abuela era toda una fuente de sabiduría en mi niñez y lo sigue siendo...Una de las enseñanzas más linda que nos dejó fue ganarnos las cosas con trabajo. Somos los únicos nietos de mis abuelos maternos, y únicos sobrinos de mi tía, eso podría haber hecho muy fácil que de vez en cuando nos regalaran dinero o plata pero mis abuelos nos eneseñaron que mejor era ganarlo. A mí me reservaban los trabajos meticulosos, la abuela decía que yo era detallista y eso le gustaba.  Aunque la abuela siempre tuvo alguien